jueves, 25 de noviembre de 2010

Locuras (Silvio Rodriguez)

Hay locuras para la esperanza,
hay locuras también del dolor.
Y hay locuras de allá,
donde el cuerdo no alcanza,
locuras de otro color.

Hay locuras que son poesía,
hay locuras de un raro lugar.
Hay locuras sin nombre,
sin fecha, sin cura,
que no vale la pena curar.

Hay locuras que son
como brazos de mal:
te sorprenden, te arrastran,
te pierden y ya.

Hay locuras de ley,
pero no de buscar.
Hay locuras que son la locura:
personales locuras de dos.

Hay locuras que imprimen
dulces quemaduras,
locuras de Diosa y de Dios.
Hay locuras que hicieron el día,
hay locuras que están por venir.

Hay locuras tan vivas,
tan sanas, tan puras,
que una de ellas será mi morir.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Con brocha y pintura: Plasmando Rebeldías (dedicado a la gente que quiero y que sabe que la quiero)

Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla, que no hay que decirle que haga las cosas, sino que sabe lo que hay que hacer y que lo hace. La gente que cultiva sus sueños hasta que esos sueños se apoderan de su propia realidad.

Me gusta la gente con capacidad para asumir las consecuencias de sus acciones, la gente que arriesga lo cierto por lo incierto para ir detrás de un sueño, quien se permite huir de los consejos sensatos dejando las soluciones en manos de nuestro padre Dios.

Me gusta la gente que es justa con su gente y consigo misma, la gente que agradece el nuevo día, las cosas buenas que existen en su vida, que vive cada hora con buen ánimo dando lo mejor de sí, agradecido de estar vivo, de poder regalar sonrisas, de ofrecer sus manos y ayudar generosamente sin esperar nada a cambio.

Me gusta la gente capaz de criticarme constructivamente y de frente, pero sin lastimarme ni herirme. La gente que tiene tacto.

Me gusta la gente que posee sentido de la justicia.

A estos los llamo mis amigos.

Me gusta la gente que sabe la importancia de la alegría y la predica. La gente que mediante bromas nos enseña a concebir la vida con humor. La gente que nunca deja de ser aniñada.

Me gusta la gente que con su energía, contagia.

Me gusta la gente sincera y franca, capaz de oponerse con argumentos razonables a las decisiones de cualquiera.

Me gusta la gente fiel y persistente, que no desfallece cuando de alcanzar objetivos e ideas se trata.

Me gusta la gente de criterio, la que no se avergüenza en reconocer que se equivocó o que no sabe algo. La gente que, al aceptar sus errores, se esfuerza genuinamente por no volver a cometerlos.

La gente que lucha contra adversidades.

Me gusta la gente que busca soluciones.

Me gusta la gente que piensa y medita internamente. La gente que valora a sus semejantes no por un estereotipo social ni cómo lucen. La gente que no juzga ni deja que otros juzguen.

Me gusta la gente que tiene personalidad.

Me gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano, es intentar sacarse de la cabeza aquello que no sale del corazón.

La sensibilidad, el coraje, la solidaridad, la bondad, el respeto, la tranquilidad, los valores, la alegría, la humildad, la fe, la felicidad, el tacto, la confianza, la esperanza, el agradecimiento, la sabiduría, los sueños, el arrepentimiento y el amor para los demás y propio son cosas fundamentales para llamarse GENTE.

Con gente como ésa, me comprometo para lo que sea por el resto de mi vida, ya que por tenerlos junto a mí, me doy por bien retribuido.

jueves, 18 de noviembre de 2010

¿Para qué sirve el amor? ... Excelente canción de la Piaf

lunes, 15 de noviembre de 2010

Edith Piaf: Temas Seleccionados con cariño























Joe Dassin









Hervé Vilard







¿Te molesta mi amor? (Silvio Rodríguez)

Te molesta mi amor?
Mi amor de juventud
y mi amor es un arte de virtud
Te molesta mi amor?
Mi amor sin antifaz
y mi amor es un arte de paz

Te molesta mi amor?
Mi amor de humanidad
y mi amor es un arte en su edad
Te molesta mi amor?
Mi amor de surtidor
y mi amor es un arte mayor

Mi amor es mi prenda encantada
es mi extensa morada
es mi espacio sin fin
mi amor, no precisa frontera
como la primavera
no prefiere jardin
Mi amor, no es amor de mercado
porque un amor sangrado
no es amor de lucrar
mi amor es todo cuanto tengo
si lo niego o lo vendo
para que respirar...

Te molesta mi amor?...

Mi amor no es amor de uno solo
sino alma de todo
lo que urge sanar
mi amor es un amor de abajo
que el devenir me trajo
para hacerlo empinar

Mi amor, el mas enamorado
es el mas olvidado
en su antiguo dolor
mi amor abre pecho a la muerte
y despeña su suerte
por un tiempo mejor
mi amor, este amor aguerrido
es un sol encendido
por quien merece amor...

sábado, 13 de noviembre de 2010

La Oreja de Van Gogh: Temas seleccionados















El Anillo del Rey

Con cariño, para todos quienes quieran compartir esta historia, gentileza de una amiga.... excelente persona.... que con estos pequeños y grandes detalles ha sido capaz de motivarnos pa' seguir luchando. Gracias Andrea por tu aporte, tu comprensión y tu sensibilidad.

"En mis tiempos de desmotivacion y de mandar todo a la cresta me acuerdo de esta reflexion" (E. Andrea Salinas Robles)

Hubo una vez un rey que dijo a los sabios de la corte:

- Me estoy fabricando un precioso anillo. He conseguido uno de los mejores diamantes posibles. Quiero guardar oculto dentro del anillo algún mensaje que pueda ayudarme en momentos de desesperación total, y que ayude a mis herederos, y a los herederos de mis herederos, para siempre. Tiene que ser un mensaje pequeño, de manera que quepa debajo del diamante del anillo.

Todos quienes escucharon eran sabios, grandes eruditos; podrían haber escrito grandes tratados, pero darle un mensaje de no más de dos o tres palabras que le pudieran ayudar en momentos de desesperación total...

Pensaron, buscaron en sus libros, pero no podían encontrar nada.

El rey tenía un anciano sirviente que también había sido sirviente de su padre. La madre del rey murió pronto y este sirviente cuidó de él. Por tanto, lo trataba como si fuera de la familia. El rey sentía un inmenso respeto por el anciano, de modo que también lo consultó. Y éste le dijo:


- No soy un sabio, ni un erudito, ni un académico, pero conozco el mensaje. Durante mi larga vida en palacio, me he encontrado con todo tipo de gente, y en una ocasión me encontré con un místico. Era invitado de tu padre y yo estuve a su servicio. Cuando se iba, como gesto de agradecimiento, me dio este mensaje (el anciano lo escribió en un diminuto papel, lo dobló y se lo dio al rey). Pero no lo leas - le dijo - mantenlo escondido en el anillo. Ábrelo sólo cuando todo lo demás haya fracasado, cuando no encuentres salida a la situación.

Ese momento no tardó en llegar.

El país fue invadido y el rey perdió el reino. Estaba huyendo en su caballo para salvar la vida y sus enemigos lo perseguían. Estaba solo y los perseguidores eran numerosos. Llegó a un lugar donde el camino se acababa, no había salida: enfrente había un precipicio y un profundo valle; caer por él sería el fin. Y no podía volver porque el enemigo le cerraba el camino. Ya podía escuchar el trotar de los caballos. No podía seguir hacia delante y no había ningún otro camino...

De repente, se acordó del anillo. Lo abrió, sacó el papel y allí encontró un pequeño mensaje tremendamente valioso. Simplemente decía: "ESTO TAMBIÉN PASARÁ".

Mientras leía "esto también pasará" sintió que se cernía sobre él un gran silencio. Los enemigos que le perseguían debían haberse perdido en el bosque, o debían haberse equivocado de camino, pero lo cierto es que poco a poco dejó de escuchar el trote de los caballos.

El rey se sentía profundamente agradecido al sirviente y al místico desconocido. Aquellas palabras habían resultado milagrosas. Dobló el papel, volvió a ponerlo en el anillo, reunió a sus ejércitos y reconquistó el reino. Y el día que entraba de nuevo victorioso en la capital hubo una gran celebración con música, bailes... y él se sentía muy orgulloso de sí mismo.

El anciano estaba a su lado en la carroza y le dijo:

- Este momento también es adecuado: vuelve a mirar el mensaje.

- ¿Qué quieres decir? - preguntó el rey - Ahora estoy victorioso, la gente celebra mi vuelta, no estoy desesperado, no me encuentro en una situación sin salida.

-Escucha -dijo el anciano-: este mensaje no es sólo para situaciones desesperadas; también es para situaciones placenteras. No es sólo para cuando estás derrotado; también es para cuando te sientes victorioso. No es sólo para cuando eres el último; también es para cuando eres el primero.

El rey abrió el anillo y leyó el mensaje: "Esto también pasará", y nuevamente sintió la misma paz, el mismo silencio, en medio de la muchedumbre que celebraba y bailaba, pero el orgullo, el ego, había desaparecido. El rey pudo terminar de comprender el mensaje. Se había iluminado.

Entonces el anciano le dijo:

- RECUERDA QUE TODO PASA. Ninguna cosa ni ninguna emoción son permanentes. Como el día y la noche, hay momentos de alegría y momentos de tristeza. Acéptalos como parte de la dualidad de la naturaleza porque son la naturaleza misma de las cosas.

sábado, 6 de noviembre de 2010

2010: Un año extraño... sino loco (Primera Parte)


Este año 2010, ha sido particularmente extraño..... sino loco. Y aun que puedo decir -sin exagerar-que toda mi existencia (no menos corta) se ha caracterizado por vivir experiencias fuertes, sorprendentes, intensas, traumáticas, inclusives hasta paradójicas, siento que a esta altura del 2010 no encuentro explicación ni sentido a lo que me quiere decir el devenir.... al final, es una realidad que pareciera construirse en el día a día: "a dulces y agraz".
Es necesario precisar que yo nunca he sido una persona muy crédula de los designios del destino, Más bien he intentado ser a veces una persona más práctrica, otras veces utópica, y muchas otras veces más estratégica y transgresora, que realmente sensata y prudente. No he caminado siempre en la lógica de cumplir con lo socialmente esperado, ó como diría un gran amigo, - a quien quiero mucho y respeto- en aquello que resulta "ser politicamente correcto". Como verán, con este comentario, reafirmo nuevamente estas visibles características que marcan parte de mi identidad, que no me definen, pero no obstante me han sido imposibles de evitar.
A fines del 2009, luego de concretar mi decisión de retirarme de la Oficina Comunal Previene, decisión que por lo demás había tomado ya en el mes de Junio de ese año, me lancé a la vida para vivir una experiencia de tomar creo yo "mis primeras vacaciones laborales". Y aun que en estricto rigor no eran vacaciones, si lo era el merecido descanso luego de varios años sin parar. Sé que solo erán 10 días, con rumbo a Santiago e Isla Negra..... pero iba cargada de emociones, de momentos que estaba convencida: serían inolvidables. No era el sueño dorado o de fantasía que muchas mujeres esperamos concientes o inconcientemente en nuestro imaginario de mujer, jajjajaa (eso de estar en una isla apacible, con un "negrito" musculoso.... y todo lo que reza). Era más bien el anhelo de encontrarme o reencontrarme conmigo misma, de rearmarme para seguir luchando, quizás para cerrar círculos abiertos, quizás para vivir nuevas experiencias.... y quien sabe, algo más.
¡¡¡A la capital los pasajes... y en avión la patuda!!!. Así llegamos a Santiago, con mi prima Mariett, y los primeros encuentros con personas que son muy significativas en mi vida, fueron la partida de caminatas, conversaciones, aperitivos, comidas exquisitas, espacios de esparcimientos geniales.... sin sentido de culpa alguno (o al menos con solo un poco para no ser tan sin vergüenza). En menos de 10 días, me encontré con amores de ayer, hoy y siempre: "con lo que no fue", "con lo que fue, y pudo llegar a ser", "con lo que nunca podrá ser porque solo es y seguirá siendo mi mejor utopia".... En este intenso viaje, también me encontré con áreas de mi vida con las cuales camino de la mano: Verdad y Justicia, nada más pero tampoco nada menos. Esta necesidad vital de la defensa de los Derechos Humanos, tan intrínsica como mi propia utopía y existencia, y de la cual no puedo escapar porque sería como negarme a mi misma, porque es mi fuente de aprendizajes y sobretodo, de sentidos de vida. La planificación de estas hermosas vacaciones, incluían también nuestro paso por el Museo de la Memoria y los DD.HH., por la tumba de Víctor Jara en el Cementerio General y por la Casa de Pablo Neruda en Isla Negra. De cada lugar recorrido, de cada silencio, fue el encuentro de un pasado dolido, con la solemnidad que cada segundo invocaba a nuestros verdaderos héroes, nuestros caídos en una lucha por el respeto a la dignidad y la vida. Quisiera contar muchas cosas de lo vivido en esas cortas e intensas vacaciones, porque estrujé los segundos al máximo como si algo se viniera en los meses siguientes. Mi retorno a mi ciudad natal, me depararía otros nuevos e increibles momentos, alegres y dolorosos a la vez ....
Ante la realidad de seguir avanzando por la vida, busqué la posibilidad de generar recursos en alguna peguita que me reportara algo de plata para subsistir en este sistema de mierda, donde la calidad de vida pareciera estar solo sujeta al dinero... Entiendo que el dinero no hace la felicidad, pero en este sistema neoliberal al menos la financia (o como dirían otros: la Auspicia).... Pensé la humilde y respetuosa posibilidad de encontrar algo parecido a "pegar estampillas", para hacer movimientos sencillos en la cual no tuviera que pensar mucho, porque ya no quería pensar. Sabía que mis pocas neuronas tendrían que orientarse a mi Tesis, el único objetivo posible de alcanzar, la mayor responsabilidad para dedicarla a aquellos que realmente lo necesitan.
En esas conversaciones informales, casuales, me encontré con Wilma cuando ibamos junto a Johanna a la Panadaría en la Avda.Tucapel. Wilma es una amiga a quien conocí en la Corporación CEAFIT, una ONG que requiere un capítulo aparte por lo vivido y de la cual tendría mucho que decir porque mis pasos llegaron hacia esa puerta de una modesta vivenda del Pasaje Las Petunias de la Población Chile por vez primera un 29 de Junio de 1989 ... ya hace 21 años atrás, y de estas historias habrá que hablar y curar las heridas correspondientes en el momento apropiado. Lo claro es que, no sé si tomé la mejor decisión de mi vida.... Hay una deuda tanto monetaria como emocional que estaba pendiente hacia mí (y aun lo está).... es un círculo que necesitaba de una vez por todas cerrar para seguir con mis utopías, que puedo decir: "caí.... caí redonditamente, caí.". El tema es que no sé si fué asertado volver al pasado nuevamente... creo que en el fondo si lo fue (pese a mis contradicciones y hasta patologías.... ¡¡¡masoquismo puro!!!) pero algo había cambiado, YO HABÍA CAMBIADO. Hay un proverbio que dice que: "Nadie se baña dos veces en el mismo río, pues siempre es otro río y otra persona", y eso es la pura y santa verdad.... y si hay un Dios que lo ve todo y lo sabe todo..... él está de testigo.... y yo tendré que curar nuevamente mis heridas, de a poco.... como los gatos.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Clásicos de un trovador enamorado: Pablo Milanés

















Clásicos de un trovador enamorado: Silvio Rodriguez













Cuando digo futuro (Silvio Rodriguez)

Te convido a creerme
cuando digo “futuro”.
Si no crees mi palabra
cree en el brillo de un gesto,
cree en mi cuerpo,
cree en mis manos
que se acaban.

Te convido a creerme
cuando digo “futuro”.
Si no crees en mis ojos,
cree en la angustia de un grito,
cree en la tierra,
cree en la lluvia,
cree en la savia.

Hay veinte mil buenas semillas*
en el valle desde ayer.
Hay restos de desesperados,
hay el hombre y su mujer.

Los hierros se fundieron ya,
hay la paciencia y queda más.

Hay un país de roca en ruinas
bajo otro país de pan.
Hay una madre que camina
codo a codo con su clan.

Los hierros se fundieron ya,
hay la paciencia y queda más.

Hay cuatro niños ahora mismo
sonriendo en una playa,
y en la trastienda de una bala
un militar que no ha dormido.

Y aquella misma muchachita
vuelve a recortar su saya;
(sí, es importante desde un niño
hasta el largo de un vestido).

Los hierros se fundieron ya,
hay la paciencia y queda más.


Yo te convido a creerme
cuando digo “futuro”.